Aplicación de flúor

El flúor dental confiere una protección sobre los dientes contra la caries dental ayudando a prevenirlas. Tiene como beneficios principales el que aumenta la resistencia del esmalte y es antibacteriano, actuando frente al crecimiento de bacterias que producen el sarro o las caries dentales. 

El barniz de flúor es un tratamiento dental que consiste en la aplicación de una solución concentrada de flúor en la superficie de los dientes. El barniz se adhiere al esmalte, liberando flúor gradualmente, lo que ayuda a fortalecer los dientes, prevenir la caries y reducir la sensibilidad. 

 

Este procedimiento rápido e indoloro se suele utilizar tanto en niños como en adultos, ya que proporciona una capa adicional de protección a los dientes y contribuye a mejorar la salud bucodental.  

La aplicación regular de barniz de flúor puede desempeñar un papel crucial en el mantenimiento de unos dientes fuertes y sanos, por lo que constituye una valiosa medida preventiva en las rutinas de cuidado dental.

Preguntas Frecuentes

El flúor es un mineral natural que puede encontrarse en diversas fuentes como el agua, el suelo, las plantas y las rocas. También se añade artificialmente a algunos dentífricos y a los suministros públicos de agua. Se ha demostrado científicamente que este mineral es beneficioso para la salud bucodental, ya que previene la caries y refuerza el esmalte dental.

Cuando consumes flúor, éste se absorbe en el esmalte de los dientes, haciéndolos más resistentes a los ataques ácidos de las bacterias y los alimentos azucarados. El flúor ayuda a remineralizar el esmalte dañado por los ácidos, evitando la formación de caries y ralentizando su aparición.

Sí, el flúor es seguro cuando se utiliza adecuadamente. La Asociación Dental Americana y la Organización Mundial de la Salud apoyan el uso del flúor para prevenir la caries dental. Sin embargo, como cualquier sustancia, el consumo excesivo de flúor puede provocar problemas de salud. Esta afección se conoce como fluorosis, que puede provocar la decoloración del esmalte o incluso picaduras en los dientes. Es importante utilizar productos fluorados y consumir agua fluorada con moderación.

Hay varias formas de obtener flúor para mantener una buena salud bucodental. Una de las formas más sencillas es utilizar dentífricos que contengan flúor. La mayoría de los dentífricos de venta sin receta contienen flúor y se recomienda su uso diario. Además, puede recibir tratamientos de flúor en la consulta de su dentista. El flúor también puede obtenerse a través del agua potable procedente de suministros públicos de agua que han sido fluorados. Si su suministro de agua no contiene flúor, su dentista puede prescribir suplementos de flúor para usted y su familia.

En general, se recomienda que los niños menores de 2 años utilicen pasta dental sin flúor. Esto se debe a que los niños pequeños tienden a tragarse la pasta de dientes mientras se cepillan. Una vez que los niños aprenden a escupir la pasta de dientes de forma eficaz, pueden empezar a utilizar pastas con flúor. Sin embargo, es fundamental que vigile el uso de pasta de su hijo y se asegure de que utiliza una cantidad adecuada, aproximadamente del tamaño de un grano de arroz, para minimizar cualquier riesgo potencial.

Sí, los adultos también pueden beneficiarse del flúor. A medida que envejecemos, aumenta el riesgo de caries y enfermedades de las encías. El flúor puede ayudar a prevenir la caries, fortalecer el esmalte y reducir la sensibilidad. Utilizar pasta dental con flúor, recibir tratamientos de flúor del dentista o beber agua fluorada son formas eficaces de mantener una buena salud bucodental en la edad adulta.